5 Cosas que hacer un día de lluvia

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Parecía que nunca iba a llegar, pero por fin hoy hemos amanecido con un poquito de lluvia. Como con todo, habrá gente a la que le guste, habrá otros que no. 

¿Sabíais que el clima nos afecta también psicológicamente? Así es. El estado de ánimo con el que nos levantamos cada día está influenciado por muchos factores: si hemos dormido bien o no, si tenemos muchas cosas que hacer ese día, si estamos disgustados con alguien, si se nos ha roto el coche, en fin.. un montón de circunstancias que hacen que estemos de un humor u otro. Pues bien, el clima también influye en ello. 

Mucha de esta influencia está mas en la relación con la luz solar, que con la bajada de temperaturas. Es decir, cuando llueve, hay menos sol, más humedad, y eso nos influye porque nuestro cerebro segrega melatonina, que hace que tengamos más sueño, estemos cansados y de peor humor; nos sentimos más tristes y tenemos menos interés en hacer las cosas. 

Sin embargo, os voy a contar 5 cosas que podemos hacer un día de lluvia. Verás como no son nada aburridas.

1. Podemos organizar una buena sesión de cine. Claro que si. Podemos ver esa película que llevamos días y días queriendo ver y que vamos posponiendo porque no tenemos tiempo. Hoy es el día. Palomitas, un refresco y tu peli favorita. ¿Acaso no es un buen plan?

2. Si tienes hijos, aprovecha para jugar con ellos. Siempre podemos acudir a los socorridos juegos de mesa: cartas, parchís, ajedrez.. Pero también podéis inventar algún juego vosotros mismos: jugar a disfrazaros, a cantar como si fuera un concurso, a buscar un tesoro…¡utiliza la imaginación!.

3. Lee un libro, date un respiro con las tareas de la casa. Siéntate en tu sofá favorito, y dedícale un tiempo a tu novela favorita, o a una guía de viaje, o incluso a mirar fotos de las vacaciones, o de aquel lugar de ensueño donde te gustaría volver. 

4. También puedes aprovechar para organizar cosas en casa. Ordenar un armario, poner en orden los papeles y las facturas, colocar aquel cuadro que hace siglos permanece en el suelo del pasillo a espera de que alguien lo cuelgue por fin, etc.

5. Que llueva no significa que tengas que quedarte en casa. Coge tu paraguas, tus botas de agua y sal a pasear! Siempre que no caiga un aguacero, pasear entre la lluvia seguro que te aportará algo positivo. Ves un paisaje diferente, escuchas la lluvia caer, y encima haces ejercicio. 

Como ves, no todo tiene que ser malo un día de lluvia. ¡Aprovéchalo!

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